Gestión de las emociones y neurociencia

Nuestro estado emocional nos influye poderosamente en nuestra capacidad de acción.

De hecho, por mucho que nuestra mente tenga los conceptos y sepa que es lo correcto o incorrecto hacer, si nuestro estado emocional no acompaña, nos quedaremos en lo teórico y no haremos nada.

Cuántas veces no sabemos que debemos ponernos a estudiar, a realizar algún trabajo y por mucho que lo procesemos a nivel mental, si no conseguimos acompañarlos de ganas, nos quedaremos sólo pensando lo que deberíamos hacer sin hacerlo.

Las emociones y su gestión, es un elemento básico para alcanzar una vida plena y en crecimiento.

Y, ¿cómo nos ayudan las emociones en nuestro día a día?:

Nos ayudan a amplificar nuestra memoria.

Todo lo vivido con una intensa implicación emocional, lo recordaremos de forma más profunda. De ahí, que las emociones sean un excelente activador del aprendizaje. Aquello que amamos lo aprendemos de forma más intensa.

Nos ayudan a detectar detonantes.

A detectar detonantes que requieran nuestra actuación inmediata. A través de emociones como el miedo, pueden protegernos o incluso salvarnos la vida.

Son básicas para relacionarnos con los otros.

Siendo el grado de inteligencia emocional que tengamos, uno de los factores que determina el éxito de nuestras relaciones sociales.

Hemos de tener presente que no toda la información que percibimos del exterior la procesamos a nivel lógico-racional. Parte de la información que recibimos va directa del tálamo a la amígdala, permitiéndonos tomar decisiones instintivas sin procesarlas racionalmente.

Tu amígdala hace que tomes decisiones muy rápidas y en fracciones de segundo sientas ganas de irte, comodidad, ira, o asco. Ahí están actuando tus emociones no tu razón.

Podemos pensar todas aquellas situaciones en las que nada más entrar en una habitación ya hemos sentido una sensación de incomodidad y nuestro estado emocional se ha puesto en alerta. O aquellas en las que nos han bastado pocos segundos para al conocer a alguien sentir que lo conocíamos desde siempre y sentirnos como en casa.

Condicionantes

En la gestión de las emociones y neurociencia.

Parte de lo vivido, principalmente en tu infancia, te estará condicionando para que esas emociones afloren rápidamente a veces sólo ante un pequeño detonante.

La secuencia de activación cerebral que cada una tenemos ante las emociones la traemos de serie, no es algo que aprendamos.

Aunque una etapa crítica para esa secuencia de activación es la que va de los ocho a los doce años.

En ese tramo de edad si suceden experiencias especialmente fuertes negativas, el circuito de activación cerebral no se desarrollará correctamente y posteriormente cuando el niño sea adulto seguirá adoleciendo de ese problema.

Por lo que si a esa edad el niño experimenta violencia, agresión, abandono… las conexiones neuronales se llevarán a cabo de manera errónea, normalizando este tipo de conductas y repitiéndolas cuando sea adulto.  Esas actuaciones en el cerebro del niño se normalizarán y se convertirán en pautas.

Si por el contrario, la experiencia del niño es emocionalmente estable, su cerebro tendrá mayor estabilidad emocional y tendrá mayor tendencia a sentirse seguro y a funcionar mejor socialmente en su etapa adulta.

Todo nuestro sistema está interrelacionado. Nuestras emociones pueden cambiar nuestra fisiología cerebral, nuestra fisiología puede cambiar nuestras emociones y a la inversa.

Por ejemplo, una persona con la emoción constante de tensión acabará con problemas de espalda y fisiológicamente incluso su rostro se irá modificando. Es decir, nuestras emociones influyen en la constitución de nuestro cuerpo. Y a la inversa sería como por ejemplo, al bajar el ritmo de nuestra respiración podemos disminuir una emoción de tensión o estrés.

Por ello, al trabajar sobre la gestión de nuestras emociones estamos incidiendo en nuestro cuerpo mental y físico. Y el trabajarlos de forma conjunta nos da más resultados en nuestro camino de crecimiento personal.

La información es poder, y comenzar a conocer nuestras emociones será clave para poder gestionarlas.

Y como dice la frase de Goethe: «No conseguirás conmover otros corazones si del corazón nada te sale».

Síguenos en nuestras redes sociales facebook, instagram y youtube.

Y si deseas recibir más contenido para ayudarte en tu proceso de crecimiento personal, aquí te dejamos la suscripción, para que puedas recibir la guía CCD, una guía de herramientas prácticas que te ayudará a conectar contigo misma.

CONSOLIDA Y ESCALA TU NEGOCIO

CONSOLIDA Y ESCALA TU NEGOCIO

3 CLASES GRATUITAS con los aspectos clave a llevar a cabo para conseguir que tu proyecto sea un negocio rentable

You have Successfully Subscribed!