Nudos que frenan el crecimiento de tu proyecto.

El lema de “ A veces el árbol no nos permite ver el bosque” es una metáfora excelente para comprender por qué no somos capaces de detectar dónde está la fricción que hace que nuestro proyecto no avance a pesar de que le dediquemos más y más horas.

La visión general del empresario es básica a nivel estratégico, pero a nivel operativo nos será más útil poner la lupa y para ello departamentalizar tu negocio te ayudará.

Trabajar con áreas en tu empresa te ayuda a que puedas establecer objetivos no sólo en las áreas que más cómodas te resulten sino en la totalidad de la empresa.

De hecho, muchos proyectos fracasan porque los objetivos se fijan solo en el área comercial, y no se trabaja por ejemplo el área financiera, incurriendo en un exceso de gastos estructurales, que provocan que aunque la empresa venda mucho, no sea rentable.

Una estructura muy sencilla de dividir nuestro proyecto por áreas para mejorar su gestión sería el organizar el área financiera- operativa -comercial y administrativa.

¿Y qué sería lo mínimo que tenías que trabajar en cada una de las áreas para ver donde están tus nudos? Vamos a ello.

Área financiera

En esta área entre otras cosas, será donde conozcas al menos cuáles son tus gastos fijos, tus gastos variables y la inversión mínima que tienes que realizar para que tu proyecto siga creciendo, es decir, la estructura mínimo viable. Con ese importe determinarás cuál es el mínimo de ingresos que debes alcanzar, por debajo del cual estarías en pérdidas.

Si se trata de una empresa de servicios, en esta área determinará cuál debe ser su precio por hora basado en el coste, para que se conozca el punto por el cual se trabaja bajo pérdidas.

Los nudos que impiden el crecimiento en esta área suelen ser:

– No tener planificadas las inversiones que se deben realizar para que el proyecto crezca. Maquinaria más potente, equipos que introduzcan mejoras en nuestros servicios, software de gestión, herramientas de automatización, etc. Sin innovación constante nuestros proyectos no crecen de forma estable.

– Que no se conozca la estructura mínimo viable de la empresa, y no se desarrollen suficientes líneas de productos y servicios para generar ingresos que cubran esa estructura mínimo viable.

– Caer  en estructuras de financiación externa que no sean las adecuadas a nuestro proyecto. Por ejemplo, préstamos cuando lo que se necesitan sean pólizas o un exceso de endeudamiento.

– Que no se realice una revisión periódica de los gastos, proveedores y acreedores y se optimicen.

Área operativa.

En esta área es donde ejecutamos los productos o servicios que comercializamos, principalmente.

Y los nudos de esta área se suelen producir porque:

-no optimizamos con herramientas de automatización nuestra productividad.

– ausencia de una mejora continua de web, productos, servicios, mail marketing. Y sin esta revisión se quedan desfasados u obsoletos.

-no trabajar con agenda y terminar haciendo las tareas rutinarias o que más nos gustan y dejando para mañana las estratégicas o incómodas.

– faltar en ir cocreando los productos y servicios con el cliente para irnos adaptando al mercado.

Área Comercial

Aquí es donde realizamos ventas.

En esta área no debemos enfocarnos solo en los clientes que nos compran, sino que tenemos que tener estrategias para los tramos por los que pasa el cliente desde que llamamos su atención hasta que ejecuta la compra, e incluso la etapa de mantenimiento una vez realizada la primera compra.

Así tendremos primero estrategias para adquirir usuarios y que esta cifra sea lo más alta posible. Un ejemplo sería las personas que pasan por delante de nuestra tienda y ven el escaparate.

Los usuarios que activamos, que serían respecto al ejemplo la gente que entra en la tienda y mira.

Los usuarios activados dispuestos a comprar, que serían los que entrar al probador a probarse ropa.

Los clientes que compran. Y muy importante,  los que vuelven a la tienda tras su primera compra.

Y es básico que tengamos estrategias para todos estos tramos. El nudo suele estar:

.empresas que adquieren muchos usuarios, con un escaparate magnífico y en una excelente ubicación. O con un buen lead magnet y una excelente web.  Pero que después no activan a dichos usuarios. Tener leads que no convierten o el buyer persona no usa, no tiene sentido.

.no trabajar la propuesta de valor adecuada al buyer persona. Es decir que ese cliente activado dispuesto a comprar no encuentra en la tienda lo que busca.

. faltar en tener precios adecuados al valor que ofrecemos. Una de las razones por la que el cliente activado dispuesto a comprar no lo hace es porque pueda percibir que el precio de nuestro producto o servicio es muy superior al valor que le estamos ofreciendo.

.no cuidar al cliente que ya nos compró para que realice compras superiores o sostenidas en el tiempo.

El empresario que ponga lupa en cada una de estas fases y tenga métricas que le den información al respecto, conocerá si lo que tiene que mejorar es su adquisición de leads, su propuesta de valor, su conversión o su retención.

De ahí, que sea importante trabajar con diferentes embudos de venta: embudos de captación de tráfico, de maduración de leads, de ventas y fidelización, etc.

Área administrativa.

Aquí es donde planificamos, gestionamos el personal,  hacemos tareas administrativas…

Los nudos en esta área suelen estar.

.ausencia de protocolos de optimización de tareas, de forma que podamos realizar muchas de las tareas de forma rutinaria y que la transferencia del know how sea más sencilla.

.no reservamos tiempos solo para revisar lo alcanzado y planificar los siguientes pasos.

.no implantamos métricas adecuadas para la toma de decisiones y gestión de nuestro negocio.

Y con esto tendríamos  hecha la revisión de los nudos que frenan el crecimiento de tu proyecto.

Conclusiones a los nudos que frenan el crecimiento de tu proyecto.

Muchos empresarios creen que porque supieron como empezar su negocio ya está todo hecho, sin embargo, si nuestro negocio no tiene escalabilidad y una estrategia para crecer acabará muriendo, porque el mercado está en continuo crecimiento y cambio.

La clave está en tener objetivos claros, métricas que nos indiquen como vamos, y una estrategia de crecimiento adecuada a nuestro sector y proyecto. Y siendo conscientes de ello, buscar la formación o profesionales que nos cubran esos puntos del conocimiento donde nosotros flaqueamos.

No son tiempos fáciles para las pequeñas empresas y los emprendedores, pero ¿y cuándo lo fueron?

Nosotros para ponértelo un poco más fácil te dejamos en la página de regalo de nuestra web un manual para que puedas realizar una pequeña auditoria interna del punto en el que se encuentra tu negocio.